top of page
  • Foto del escritorGuillermo Jouvin

Sostenibilidad

Una de las estrategias que tengo como CEO de Etinar, tiene que ver con nuestro aporte a la reducción de la huella de carbono. Si bien es cierto, esta industria que construye, es también responsable de destruir el planeta.


Los principales insumos que utilizamos para construir son acero, hormigón, cemento, aluminio, cobre, plásticos, movimientos de tierra, entre otros, que son uno de tantos factores generadores de la emisión de CO2 al medioambiente. Pero asimismo, somos los responsables de crear las condiciones que han permitido mejorar nuestra calidad de vida; y por medio de infraestructura, hemos contribuido en mejorar la salubridad, creado orden y conexiones, que son una de las razones por las cuales el ser humano ha logrado, también, extender su esperanza de vida.


Estamos ante la disyuntiva entre salvar el planeta para los siguientes miles de años a costa de nuestro bienestar inmediato (cientos de años); o, de continuar como si nada pasara y seguir extrayendo todos los recursos naturales, explotando al máximo la biodiversidad para nuestro entero beneficio. Creo, que se puede hacer las dos cosas. Janine Benyus es la creadora del concepto de biomimética.


Es una idea que parte de aprender de la naturaleza para aplicar su capacidad de adaptación, supervivencia, agilidad, diversificación, retroalimentación de la flora y fauna a nuestro entorno; y cómo encuentra siempre la forma de reinventarse para seguir adelante. Los promotores inmobiliarios son los arquitectos del destino de las sociedades. Los proyectos que diseñamos, comercializamos, vendemos y construimos, serán la nueva casa, oficina, consultorio, local comercial o fábrica de alguna persona que se convierta en el usuario final de dicha infraestructura. Entonces, somos responsables de buscar la metodología de hacerlo pensando en el medioambiente y aportar con soluciones que sean energéticamente eficientes, sustentables en términos de consumo de agua, sembrando vegetación que contribuya a atrapar el CO2, creando ecosistemas de uso mixto para que las personas tengan todo al alcance y se movilicen lo menos posible. Sembrar vegetales comestibles orgánicos, aeropónicos, dentro del mismo proyecto para que se convierta en la principal fuente de alimentos vegetales del barrio, entre muchas otras alternativas.


Es nuestra responsabilidad hacerlo. Debemos ejecutarlo de manera económicamente sustentable, por supuesto. Tiene que ser financieramente viable para poder acceder a mercados de clientes que estén dispuestos a aportar su grano de arena a este propósito sin que tengan que invertir mucho más. Y que las condiciones de largo plazo, les resulte favorables de manera que sea mejor inversión para ellos también.


Hoy estamos viviendo la era de la aceleración y el conocimiento. Es relativamente sencillo acceder a información desde la internet por medio de podcasts, seminarios, cursos, artículos, o incluso grados universitarios que se dan en línea. También se ha vuelto popular trabajar remotamente desde el hogar o en oficinas de coworking para hacer su propio network. El mundo está cambiando a servicios y trabajos que se pueden dar sin movilizarse de un lugar a otro. El entorno puede tener todo lo que necesitamos a la mano para producir, vivir, descansar y entretenerse. Así es como siento que debemos diseñar los futuros desarrollos inmobiliarios en el mundo. Crear ecosistemas, insisto. Solo te mueves para casos especiales. La idea es hacer consciencia y que todos pensemos en el medioambiente para ayudar a limpiar el planeta de las toneladas de dióxido de carbono que botamos al ambiente, entre otros gases que también son nocivos. Es hora de apostar a hacernos amigos de la madre naturaleza. Se están comenzando a dar condiciones en el mundo y nuestro país no debe ser la excepción. Debemos tener una cultura de pertenencia con el Ecuador. Ser dueños de nuestro país.


Es nuestra tierra, nuestro barrio, nuestra ciudad y nuestro país. Personalmente estoy comprometido a dar mi grano de arena. Mis próximos proyectos ya tienen esa cuota medioambiental. Estamos desarrollando proyectos con arquitectura biomimética. Estamos observando lo que hace la naturaleza para sobrevivir y aplicarlo a nuestros diseños arquitectónicos. Es nuestra obligación dejar un mejor planeta del que recibimos. No podemos echar la culpa a nuestros antepasados. O a los vecinos. O a los demás países. Tarde o temprano vendrán regulaciones más fuertes e impuestos “verdes”. ¿Por qué esperar a que sea obligatorio? ¿Por qué no adelantarnos y hacerlo por iniciativa propia? Sin que nadie nos obligue.

36 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page